Energía nuclear ni civil, ni militar
La concentración se ha lllevado a cabo en la puerta principal de la Base de Rota, donde se ha entregado un comunicado a las autoridades militares norteamericanas y españolas. Luego se pasó a entregar en las dependencias municipales de Rota otro comunicado , para pasar a proyectar un montaje audiovisual en la Plaza del Castillo. Hacia finales de 1945, las bombas habían matado 140.000 personas en Hiroshima y 40.000 en Nagasaki.
Desgraciadamente, el peligro de las armas nucleares no es cosa del pasado. Hoy en dia, nueves paises disponen de la bomba atómica: Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Israel y Corea del Norte. Entre todos estos paises suman un arsenal nuclear de más de 10.000 cabezas nucleares operativas para ser utilizadas en cualquier momento, con una capacidad destructiva como para repetir más de 130.000 veces el desastre de Hiroshima. Además, en Andalucía, los puertos de las bases militares de Rota y Gibraltar sirven de base de atraque de un fluido tráfico de submarinos nucleares.
Por otro lado, a lo largo de todo el planeta hay 437 reactores nucleares de uso civil para la producción de energía, ocho de los cuales se encuentran en España. Pero la breve historia del uso civil de la energía nuclear también ha estado salpicada de acontecimientos que han puesto de manifiesto su alta peligrosidad, como el accidente de Three Mile Island en Estados Unidos en 1979 o Chernóbil en Ucrania en 1986.
El desarrollo tecnológico de la energía nuclear de uso civil y de uso militar ha sido complementario el uno del otro. La energía nuclear siempre ha sido cara y ha sido impulsada, entre otras razones, para justificar la nuclear militar; los países con armas nucleares son de los que tienen más reactores civiles; países como Irán son sospechosos de desarrollar industria nuclear militar porque están desarrollando la civil; la proliferación nuclear es hoy un peligro planetario.
Los riesgos asociados a la energía nuclear en todas sus formas, civil y militar, como bien ha demostrado el accidente nuclear de Fukushima, son algo a evitar, y solo la presión cívica puede conseguirlo.
Manifiesto leido:
XIª MARCHA DEL SILENCIO: ENERGÍA NUCLEAR NI CIVIL NI MILITAR. HIROSHIMA NUNCA MÁS, FUKUSHIMA NUNCA MÁS.
Las organizaciones sociales de Andalucía, plenamente conscientes de la urgencia de responder con firmeza y con alternativas a la amenaza nuclear civil y militar –y a las catástrofes reales como las de Fukushima–, venimos convocando la MARCHA DEL SILENCIO, ante la Base Aeronaval de Rota, desde hace más de una década. Nuestro objetivo ha sido siempre, a la vez que se llevan a cabo los actos conmemorativos en recuerdo de las víctimas de los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945, mostrar nuestro rechazo tanto al uso de la energía nuclear para fines civiles como nuestra más radical exigencia de desmantelamiento de todo tipo de arsenales de destrucción masiva (armas nucleares, químicas y biológicas). No olvidamos que a lo largo de todo el planeta hay 437 reactores nucleares de uso civil para la producción de energía, ocho de los cuales se encuentran en España.
En nuestro mundo, globalizado a la fuerza por los intereses del Capital y el nuevo orden militar mundial impuesto desde EE.UU., China y otras potencias nucleares, la Solidaridad y la Paz se abren camino a muy duras penas. A los andaluces, sobre todo a los gaditanos y gaditanas, así como a nuestros vecinos del norte de Marruecos, nos toca sufrir una parte importante de los peligros de la globalización, concretamente uno: la capacidad nuclear de las bases de Rota, Morón y Gibraltar y, particularmente, el tráfico naval atómico al pie de nuestras casas. Como es sabido, los submarinos nucleares británicos, franceses, norteamericanos, etc., deambulan continuamente por la zona del Estrecho de Gibraltar, cuando no recalan directamente (a veces averiados) en “nuestros” puertos de las bases de Rota y Gibraltar. El conocido episodio del submarino Tireless (año 2000), sin mencionar las bombas atómicas caídas sobre Palomares (año 1966) o la estancia de un potente arsenal nuclear en la Base de Rota hasta 1976, dejan patentes los graves peligros que hemos corrido y seguimos padeciendo.
Actualmente, nueves países (Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Israel y Corea del Norte) disponen de armas atómicas. Entre todos estos países suman un arsenal nuclear de más de 10.000 cabezas nucleares operativas para ser utilizadas en cualquier momento, con una capacidad destructiva como para repetir más de 130.000 veces el desastre de Hiroshima. Los recientes acuerdos de desarme START (firmados por Obama y Medvédev el año pasado) parece que llevarán a la reducción de las ojivas nucleares estratégicas desplegadas de estas dos potencias a “solamente” unas 3.100 para 2017, pero esto nos parece muy insuficiente y nos preguntamos, con la máxima preocupación, si en esta estrategia de mutuo y permanente enfrentamiento las bases de Rota, Morón y Gibraltar son o no blancos nucleares.
Por todo ello, este año queremos, particularmente, expresar lo siguiente:
Nuestra preocupación por lo ocurrido en Fukushima y nuestra exigencia de que se cierren los reactores nucleares en España.
Nuestra denuncia por la ausencia de planes [conocidos] de evacuación nuclear para el entorno poblacional de la Base Aérea de Morón, así como para los de la Bahía de Cádiz y Algeciras (en caso de accidentes o catástrofes nucleares de origen militar cuyo riesgo es real y así está reconocido en el “convenio” con EE.UU.)
Nuestra alarma por las noticias aparecidas en WikiLeaks sobre traslado de las escalas de submarinos atómicos de la Base de Gibraltar a la de Rota;
y nuestra denuncia por la falta de información real entorno a esas modificaciones (activadas en febrero de 2011) del acuerdo España-USA que afectan, o más bien “se supone que afectan positivamente”, a la protección ambiental en la provincia de Cádiz; modificaciones por las cuales se supone que las autoridades militares norteamericanas informarán de ahora en adelante a las españolas sobre las condiciones, eventualidades, etc., de carácter medioambiental de las bases de Rota y Morón.
Desde aquí, nuestro vivo y emocionado recuerdo para todas las víctimas de las armas atómicas y de los accidentes nucleares, así como nuestro compromiso de mantener la reivindicación del fin del uso de la energía nuclear para fines militares y civiles, todo ello por el Derecho a la Paz de los pueblos del mundo y la Madre Tierra.
Red Antimilitarista y Noviolenta de Andalucía [integrada por: Ecologistas en Acción de Andalucía, Confederación General del Trabajo-Andalucía, Noviolencia Ahora (Jerez), Casa de la Paz de Sevilla (Mujeres de Negro, Alternativa Antimilitarista-M.O.C. Sevilla, REDPAZ), Ahimsa (Málaga), M.O.C.-ELAIA (Puerto Sta. María), Madres contra la Droga ANDAD (Puerto de Sta. María), RANA-Algeciras]
No hay comentarios:
Publicar un comentario